Tarragona ya es candidata a organizar los JJJMM del año 2017. O, si lo prefieren, “Tarracajorrani”. Como explicaba un comentarista anónimo de este periódico, nunca se había celebrado tanto ganar un solitario haciendo trampas. Cabe destacar que dicha celebración sólo era apta para menores de 10 años, como efectivamente así ha sido. Menores de 10 años o integrantes de esa nueva especie tan propia de la “ciudad-partido” que empieza a ser Tarragona que no es otra que la del “palanganero”. Eso sí que merecería un estudio numérico del Mago Añó, que podría echar un número en una mala tarde y explicarnos cuantos “palanganeros” previo pago ha conseguido juntar la “Pre-Candi” en el último año.
También merece un estudio aparte la presencia en la
foto oficial de familia del Sr. Francisco Luengo, administrador de varias empresas en red y reconocido ingeniero financiero.
La desfachatez del “Clan” termina por arredrar a la oposición local, que lo fija todo a la sustitución del Presidente Ejecutivo de la “Candi”, incapaces de comprender el alcance del “caso Tecnigenia” o el significado de la “Fundació Nàstic al Món”, que superan en mucho el ámbito de la Candidatura de los JJMM. No se trata, pues, de sustituir al Presidente Rigau sino de saber donde están los
249.192 euros que la “Candi” ha pagado a
Tecnigenia (148.706 + el 10% del presupuesto de elaboración del Dossier) Services Solution Providers (38.995 euros) y
Direct Serveis (9.991 euros) de los cuales sólo se aportaron facturas y justificantes de cobro por valor de
185 euros. Es decir, andan por ahí
249.000 euros sin justificar ante la opinión pública. Y si son justificados, no hay por qué relevar al Presidente Rigau.
Uno de los aspectos más “sorprendentes” de la gestión de Rigau al frente del proyecto ha sido la capacidad de implicar capital privado en la financiación de los gastos de la “Candi”, puesto que lo que sí que ha quedado probado es la alegría en el dispendio con ordenadores de 2.000 euros y una página web de más de 100.000 euros. Lo que en el resto de campos de actuación de la empresa privada son estrecheces y auditorías con lupa aquí se torna en jolgorio y solidaridad con la causa. Una de las aportaciones más sonadas, esta vez de capital público, fue la del
Puerto de Tarragona, que el pasado
8 de Agosto de 2008 soltaba
50.000 euros a la “Candi” en pleno escándalo de las adjudicaciones a dedo.
Si echamos la vista atrás y recuperamos la añorada y extinta web de Tecnigenia nos encontramos con una noticia que dice así:
“Tecnigenia con SSP Algerie abren oficina en Orán. El objetivo es dar cobertura a las necesidades industriales de la zona norte de Argelia. Tecnigenia dará mayor soporte logístico para el desarrollo del proyecto de investigación solicitado por el Puerto de Tarragona en el Norte de Argelia.”
Así, y según la web de Tecnigenia, el Puerto de Tarragona habría solicitado un “proyecto de investigación” a una empresa denominada
SSP Algerie, a la que Tecnigenia acudiría a auxiliar con todo su capital humano disponible (ya saben, un ser humano, Francisco Luengo, y un espectro, Mohamed Amelall).
Curiosa “joint-venture” entre Tecnigenia y SSP Algerie. Tecnigenia ya sabemos lo que es, pero, ¿qué es SSP Algerie?
Pues bien, las siglas de SSP Algerie no son otra cosa que
Services Solution Providers Algerie S.A.R.L. sociedad de nacionalidad argelina participada desde el año
2005 en un
95% por
Services Solution Providers S.L. Como nuestros lectores conocerán, Services Solution Providers S.L. es una sociedad creada en
1998 por Francisco Luengo y otro socio al
50% y cuyo objeto social era en esa fecha la
“organización de fiestas, festivales, conciertos y demás eventos públicos, así como la prestación de servicios de hostelería y catering”.
Dicha sociedad es administrada por el Sr. Luengo y cuenta en su haber con la contratación del exconcejal de CiU, Agustí Mallol, en el plazo de tiempo que va entre el
27 de Julio de 2007 (dos meses después de las pasadas elecciones) y su contratación por
SIRUSA en Julio de 2008. Al cierre del ejercicio de 2007, dicha empresa contaba con unos fondos propios negativos de más de
66.000 euros, conseguidos con la persistente concatenación de resultados operativos negativos. Aún así, Services Solution Providers S.L. se podía permitir disponer de una filial en Argelia capaz de recibir encargos de una institución como el Puerto de Tarragona.
Si lo que nos contaba la web de Tecnigenia fuera cierto, deberíamos convenir que el Puerto de Tarragona habría encargado un “proyecto de investigación” a una “joint-venture” conformada por Francisco Luengo de una parte (Tecnigenia) y Francisco Luengo de la otra parte (SSP Algerie SARL).
Si lo que nos contaba la web de Tecnigenia fuera falso, ¿por qué tendríamos que creer el resto de cosas que nos han contado hasta la fecha al respecto de la colaboración de Tecnigenia con la “Candi”?